ARTÍCULO
DE LA PÁGINA HERMANA
samblea.blogspot.com
Desde que comenzó "la crisis", se ha atacado por parte de tertulianos, expertos, periodistas y políticos a la llamada "Administración Paralela". Un supuesto entramado de empresas públicas y fundaciones creadas por los diversos gobiernos centrales y autonómicos de cara a enchufar a "su gente", otorgándoles cargos, prebendas y contratos blindados. No nos cabe duda de que en dichas empresas hay un puñado de elementos de dudosa utilidad, metidos a presión por los caciques encaramados en el chollo. Pero tampoco nos cabe duda de que en esas empresas hay decenas de miles de trabajadores que cumplen sus funciones, y que muchas de esas funciones son muy útiles. Desde que comenzó esta crisis hemos visto, además, cómo entre quienes abogan por su eliminación "para ahorrar", nadie se ha molestado en elaborar un mapa de esas empresas, qué gasto implican, qué hacen, dónde se podría meter la tijera en ellas... Y el gasto que supondría su desaparición y transferencia de sus funciones a empresas privadas.
Nosotros, desde este modesto blog, en ningún caso estimularemos el enfrentamiento entre trabajadores, públicos o privados, de oposición o de contrato, de grupo A o E, porque pensamos que todos somos las víctimas de unas fuerzas económicas que nada tienen que ver con nosotros. Somos de la opinión de que educación, sanidad, escuelas de infancia, servicios domiciliarios a personas con dependencia, centros de día, desempleo con cobertura digna para los parados, vivienda asequible, pensiones, tienen que ser intocables y tienen que subir. Es nuestro patrimonio y el que dejaremos a nuestros hijos. Creemos que las Empresas Públicas, lo son tanto como los Centros de Salud mientras no se demuestre lo contrario. Y creemos que el dinero para financiar esos servicios tiene que salir -siguiendo un criterio de justicia-, de quienes lo tienen: los bancos, los grupos de inversión, las grandes fortunas tienen que pagar el coste social de una crisis que no hemos provocado.
Ellos, en cambio, han llevado a cabo una política que nos está llevando al desastre. Ejemplo: Reforma laboral para crear empleo, su resultado según la EPA,, casi seis millones de parados. La mentira es tan evidente, que no cabe meterse en demasiadas especulaciones. Lo único que pretenden esas políticas agresivas, es transferir rentas de los trabajadores y de las pequeñas empresas, a las grandes fortunas, a las que, por si fuera poco, les han dado una amnistía fiscal.
Así que las alternativas están claras: revertir la bajada del Impuesto de Sociedades para empresas que facturen más de 150 millones anuales, mantenimiento del Impuesto sobre el Patrimonio, eliminar la bajada del Impuesto sobre Sucesiones, basta de amnistía fiscal, persecución del fraude fiscal de las grandes fortunas, grandes empresas y bancos. Se calcula que están evadiendo en torno a los 66.000* millones de euros desde que se inició la crisis. Han salido del país casi 300.000** millones de euros hacia paraísos fiscales y hacia inversiones "rentables" en países emergentes. Por lo tanto, ¿dónde está esa crisis que hace que el recorte de 6.000 millones de euros en sanidad, nos haya dejado sin paga extra, con incremento de jornada, con contratados despedidos, con centros de salud cerrados, con la lista de espera galopando? Pues está en el bolsillo de los evasores fiscales y de los inversores en deuda pública. A ellos no les mandarán los gobernantes a los antidisturbios a romperles la cabeza, ni se les modificará el Código Penal para meterlos ligeros de por vida entre rejas, a pesar de que estén matando a gente de hambre, de enfermedad y de desesperación.
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