19.01.15.- DIEZ INGREDIENTES PARA COLAPSAR LAS URGENCIAS (Paracelso)

HACINAMIENTO EN UNA SALA DE URGENCIAS

1.- Desmotivar los dispositivos de atención primaria. Dejar este primer nivel asistencial axfisiado económicamente (zona básicas y distritos)

2.- Ignorar la importancia de las urgencias de especialidad en el segundo nivel asistencial (Centros de Especialidades Periféricas)

3.- Desimplicar a las jefatutras de la "Unidades Clínicas de Gestión"  del tercer nivel assistencial (Hospitales)

4.- Mermar presupuestos de urgencia, privatizando actividades asistenciales, con un claro finalidad de lucro.

5.- Convertir el "perihospital"  en un espacio idóneo para el negocio fácil. Empresarios que tiene asegurado sus clientes, forzados inexorablemente, a acudir a los espacios sanitarios. (aparcamientos, televisores, cafeterías...)  Todo ello a expensas de concesiones ventajosas y deficitarias para la " caja pública"

6.- Convertir los espacios públicos de urgencias, en las urgencias de las entidades privadas. Mutuas de accidentes, compañías sanitarias, aseguradoras... Toda esta actividad se lleva a cabo a diario, sin compensación económica alguna para los servicios públicos. A deshora, y en poblaciones pequeñas, es la rutina diaria. El trabajo profesional y los gastos generados en los servicios de urgencias públicos, son facturados a los asistidos por las entidades privadas.

7.- Creer que los espacios de urgencia no precisan de los recursos suficientes para los tránsitos, esperas, zonas de descanso adecuado para el personal... Ante la demanda a las diferentes direcciones, la única respuesta ha sido el consabido: "no hay sitio" La única solución de los responsables, ha sido entrar por cualquier puerta del hospital, menos por la de urgencia.  La creciente proliferación de espacios inútiles, cargos inútiles, y responsables mal preparados, han llevado a los espacios de urgencias a convertirlos en lugares de "no encuentro" haciendo irrespirable la relación médico-paciente, enfermero-paciente, medico-enfermero....

8.- Descuidar el difícil equilibrio entre derechos y deberes. Una malintencionada propaganda al ciudadano, han llevado a fomentar actitudes egoístas, poco solidarias, incluso en algunos casos violentas, en un espacio donde se toman decisiones vitales.

9.- El vanalizar asistencias, sin tener en cuanta que por simple que sea,  un profesional   tiene que firmar al alta del paciente.  Tras un alta siempre está la firma del  profesional. Recae sobre él, la responsabilidad de decidir los medios que precisa y la  calificación de la misma.

10.- Recortar  en el capitulo I y en el plan de inversiones, en un espacio delicado y frágil, como son  las puerta de  urgencias. Abierta las 24 horas del día, 365 días.  Un delicado vestíbulo por el que se entra ante situaciones ni previstas, ni programadas.

Paracelso