ROBOTS
Pasan desapercibidos.
No se les ve.
Mutan.
Son cesados, sin hacer ruido.
O dimiten, agarrados a las puertas giratorias,
que veloces los centrifugan a la gestión privada.
No reciben.
Solo se informan, de los mandos que ellos acreditaron.
Desconocen la realidad.
O se la fabulan.
Quizá, hicieron algún curso en la escuela de salud pública de Granada,
Y alguien les enseño a decidir sin alma.
Y deciden.
Y ahí esta el problema.
O no deciden,
porque lo que temen,
es ser vistos detrás de su propia sombra.
Paracelso
Hoy
día, los profesionales y trabajadores sanitarios son víctimas de una
gestión deshumanizada que no los tiene en cuenta como personas. Y si
bien en cifras, nuestra empresa puede haber mejorado en “costos y
eficacia”, difícilmente puede haber mejorado en eficiencia real. Es
imposible que una gestión sea auténticamente eficiente cuando muestra
una falta de respeto y de reconocimiento hacia los trabajadores,
convirtiéndose en un auténtico obstáculo para el trabajo de los mismos.
Les obliga a un sobreesfuerzo, los desmotiva y agrede su salud física y
psíquica, hasta enfermarlos. Evidentemente, no puede haber eficiencia
en una gestión reñida con la ética.
Una médico del Hopital de El Toyo en Almería capital, dependiente de la Agencia Pública Empresarial Sanitaria Hospital de Poniente, se ha visto obligada a renunciar a la reducción de jornada laboral que había solicitado para cuidar a su hijo mientras recibe quimioterapia, debido a que la nómina se le quedaba en 751 euros.
Según la información facilitada a Noticias de Almería por el Sindicato Médico por la afectada, hace algo más de un mes diagnosticaron a su hijo mayor una extraña enfermedad llamada Histoocitosis, que le obliga a recibir quimioterapia durante varios meses, al menos inicialmente de modo semanal. Al darse la circunstancia de que realiza cinco guardias al mes, como mínimo dos de ellas en fin de semana, decidió solicitar la reducción de jornada a la mitad “conservando las retribuciones íntegras”, una posibilidad para estas situaciones que según afirma recoge el convenio y la ley correspondiente.
La afectada cuenta que “tras más de un mes y más de cinco reuniones con la Gerencia, Dirección de Recursos Humanos” logra que le concedan ese derecho, ya que se excusaban en que “desconocían” la existencia del mismo y se acogían a que “no hay precedentes” y tampoco “formulario” para la solicitud. Pero la nómina le llegó con un total de 751 euros, una cantidad que no considera “justa” al no ser la que exige el convenio, es decir, la misma cuantía que antes, la paga íntegra.
Esto la ha obligado a pedir su reincorporación a jornada completa a pesar de que restan muchas sesiones de quimioterapia a su hijo mayor.
Desde el Sindicato Médico han hecho gestiones con la Gerencia para evitar que “cuidar de un hijo conlleve empobrecerse” pero de momento no ha tenido éxito, por lo que lamentan que esta sea la “protección” que la Junta de Andalucía y el SAS dan a una madre trabajadora en estas circunstancia tan extremas.
noticiasdealmería.com
Una médico se ve obligada a renunciar a cuidar a su hijo enfermo por que el SAS le deja la nómina en 751 euros
Había pedido una reducción de jornada a la mitad manteniendo las retribuciones pero sólo le han concedido lo primero
Una médico del Hopital de El Toyo en Almería capital, dependiente de la Agencia Pública Empresarial Sanitaria Hospital de Poniente, se ha visto obligada a renunciar a la reducción de jornada laboral que había solicitado para cuidar a su hijo mientras recibe quimioterapia, debido a que la nómina se le quedaba en 751 euros.
Según la información facilitada a Noticias de Almería por el Sindicato Médico por la afectada, hace algo más de un mes diagnosticaron a su hijo mayor una extraña enfermedad llamada Histoocitosis, que le obliga a recibir quimioterapia durante varios meses, al menos inicialmente de modo semanal. Al darse la circunstancia de que realiza cinco guardias al mes, como mínimo dos de ellas en fin de semana, decidió solicitar la reducción de jornada a la mitad “conservando las retribuciones íntegras”, una posibilidad para estas situaciones que según afirma recoge el convenio y la ley correspondiente.
La afectada cuenta que “tras más de un mes y más de cinco reuniones con la Gerencia, Dirección de Recursos Humanos” logra que le concedan ese derecho, ya que se excusaban en que “desconocían” la existencia del mismo y se acogían a que “no hay precedentes” y tampoco “formulario” para la solicitud. Pero la nómina le llegó con un total de 751 euros, una cantidad que no considera “justa” al no ser la que exige el convenio, es decir, la misma cuantía que antes, la paga íntegra.
Esto la ha obligado a pedir su reincorporación a jornada completa a pesar de que restan muchas sesiones de quimioterapia a su hijo mayor.
Desde el Sindicato Médico han hecho gestiones con la Gerencia para evitar que “cuidar de un hijo conlleve empobrecerse” pero de momento no ha tenido éxito, por lo que lamentan que esta sea la “protección” que la Junta de Andalucía y el SAS dan a una madre trabajadora en estas circunstancia tan extremas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario