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| (Foto de hispanismo .com) |
De pequeño.
Camino de un bar a las espaldas de la oficina de correos de Sevilla.
A lado de un recio militar.
Librepensador.
Pleno régimen.
En el balcón: el dictador a quien servíamos.
Algunos taconeaban y movian los brazos, componiendo agradecidos bailes regionales.
Sevilla.
Hice ademan de acercarme a la bulla.
Aquel hombre sabio me dijo.
"Esos que le bailan, son los mismo que en su día lo matarían"
Y sin dedsviar un solo centimetro de su trayectoria, llegamos al garito.
Y nos encajamos entre pecho y espalda el mejor pavía de bacalao de Sevilla .
...
Colas en el ayuntamiento de Sevilla.
Tanatorio público.
Y los comentarios.
Y que sabio el silencio.
Susana y Valderas elogian el amor de la difunta a la tierra andaluza.
Y a la que no es andaluza.
A su tierra andaluza.
Que sabio el silencio.
Mejor que calleis desde la izquierda.
Porque son tiempos de paro, de desahucios, de gente sin tierra.
Tiempo de campos mal repartidos.
De hambres bién repartidas.
Susana, Valderas....silencio.
Calladitos...por resspeto a todos los que ya no están con nosotros.
Paracelso
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