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| LA GRANDEZA DE LA META, NO HACE GRANDE AL CAMINO, SINO SEGURAMENTE, ARDUO |
LA CLAVE ESTÁ EN EL CAMINO
Fuimos a:
Fuimos a:
Una de tantas conferencias.
Los miembro de la mesa,
sesudos izquierdistas, se preguntaban:
¿Que es el Poder Popular?
Y confesaron no tener la respuesta.
Y confesaron no tener la respuesta.
Ya, mediada la sesión,
y en el turno de intervenciones
era del dominio de todos,
que más sabía el auditorio de Poder Popular,
que los propios ponentes.
Da gusto sentirse auditorio,
cuando desde los púlpitos se flojea.
Desde abajo, hablaban individuos anónimos,
que reforzaban la idea común,
que con gran capacidad docente,
trataban de explicar, a una mesa ignorante en el tema.
Poder en si mismo,
(si se habla desde el presente)
es una fuerza.
Si se suman muchos pequeños vectores de fuerza,
es un Poder Popular.
Desde la mesa, se hablaba del futuro,
de la quimera,
de la utopía.
Desde el aforo, se hablaba de presente.
De fuerza.
De Poder Popular.
Pero existía un inmenso abismo.
Público y ponentes,
estábamos separados
por los 20 centímetros de mayor altura,
a la que estaba situada la tarima.
Al Poder Popular hay que llegar.
Si se consigue se tiene.
Y si conseguido no se cuida se pierde.
No es material.
Pero se puede percibir colectivamente
Casi palpar..
Casi palpar..
Se sabe de él, por el camino recorrido para conseguirlo.
Y de ese camino, la mesa, no sabía absolutamente nada.
20 centimetros de tarima eran suficientes.
para perder la perspectiva.
Representaban los cargos, no la fuerza.
Ignoraban que era el Poder Popular,
porque desconocían que la fuerza estaba en el camino.
Y que en sus orillas, a cada paso, .
porque desconocían que la fuerza estaba en el camino.
Y que en sus orillas, a cada paso, .
aparecerían las herramientas para conseguirlo
Paracelso
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