Queridos
amigos:
Una persona
(cuyo nombre voy a silenciar) me envía este recorte de prensa. Lamentable. Es
inconcebible tal cinismo en una de las personas mas nefastas (quizá la qiue
más) que ha conocido el Hospital en las últimas décadas.Alguien que pretende,
como tantos "héroes"· haber derrotado el franquismo y ser un adalid
de las libertades, cuando se dedicó a adular y complacer a todo alto cargo que
se le pusiera a tiro, tanto en la época franquista (el dice lo amigo que fue de
sus directores en aquella época) como en la actual (unas veces de frente, otras
haciendo un doble juego de crítica por la mañana y compadreo por la tarde).
Alguien que dice haber rechazado cargos, cuando ha encontrado la posición más
cómoda del mundo intrigando y manipulando en la sombra pero rechazando toda
responsabilidad. Alguien que habla de exceso de médicos pero que quiere más
burócratas. Alguien que presume de lealtades, cuando estuvo segando la hierba
bajo los pies del anterior Jefe de Servicio (persona de enormes méritos a la
que no llega ni a las altura de la suela de sus zapatos) para sustituirlo, con
un concurso al uso de candidato único y tribunal entregado. Alguien que
haciendo suya la idea del Dr. Gonzáles de la Puente (q.e.p.d..) de crear una
Unidad relacionada con Primaria, una más en el seno de las magníficas Unidades
preexistentes en Medicina Interna, se ha dedicado a desmontar una estructura
ejemplar, de reconocimiento nacional e internacional, desarrollada por
profesionales extraordinarios a lo largo de muchos años,de manera que ha
conseguido un servicio desmoralizado, dividido y descontento (independientemente
de contar con un grupo entusiasta de "adeptos", término surgido
dentro de su mismo entorno que lo defenderá a capa y espada,porque saben lo que
se juegan).Un Servicio que contaba con unas Unidades líderes en docencia,
investigación y asistencia, absolutamente volcado en los pacientes (él no ha
aportado nada nuevo, aparte de una aburrida jerga totalitaria y rimbombante
carente de la más mínima autocrítica con la que contar a quienes mandan en
Sanidad, aquello que quieren oir); unidades que está intentando desmoronar por
todos los medios con la ayuda del llamado Director de Unidad de Gestión, su
alter ego, elegido por los mismos métodos ·"democráticos" a los que
él debe su plaza. Cargo este, Director de U.G. que, además, ha sido declarado
ilegal por decisión judicial (decisión juicial que anula, con nombre y
apellidos, incluso la concesión de dicha plaza que ha sido declarada nula). A
pesar de ello, el Señor Director de dicha Unidad sigue actuando como tal con
una trayectoria cargada de ineficacia y caracterizada por la entrega
incondicional a la administración y el desprecio absoluto y ataque directo a
unos profesionales de la medicina (seguramente los "pencos" a los que
se refiere el Doctor Cuello) cuya calidad profesional y humana está a años luz
de su incompetente mediocridad. Ataque que se concreta tanto en amenazas
(aprovechándose del carácter eventual de muchos médicos) como en hechos
consumados tales como separar a profesionales de alta cualificación de su
trabajo habitual (e intentar sustituirlos en muchos casos por unos
"adeptos", repito que es su propia terminología, sin experiencia
comparable y sin más méritos que la sumisión absoluta a sus caprichos y
carentes del más mínimo escrúpulo ante la agresión a sus compañeros) o impedir
la llegada a esas unidades altamente cualificadas, de pacientes extremadamente
complejos en una inconcebible acción de lucha contra la excelencia . Le
interesan mucho al doctor Cuello los médicos jóvenes: seguramente por eso ha
conseguido que cada año, sucesivamente, escogen formarse en su Servicio médicos
residentes que año tras año, obtrienen previamente un peor puesto en los
resultados del examen MIR (si queréis os envío las estadísticas); es decir: los
que han sacado mejor número prefieren los Servicios de M.I, de otros Hospitales
(y eso cada vez mas evidente). Por eso también, este año, magníficos residentes
que han terminado su especialidad de Medicina Interna en este Hospital han
preferido orientar sus pasos a otros hospitales. Mientras tanto, por contraste,
no cesan las peticiones para que médicos en formación de otros hospitales
soliciten estancias concretas en alguna de las prestigiosas Unidades que ellos
quieren desmontar (sin que dichos médicos deseen pasar por el ·"todo"
del Servicio).
Creo que las falsedades, las calumnias, la falta de escrúpulos, la arbitrariedad totalitaria, la ineficacia y la bisoñez de estos dos personajes, instalados en una actitud dictatorial siempre a la sombra del poder político (al que miman en una actitud de constante adulación sin la más mínima autocrítica) merece, al menos por una vez, una contestación valiente.
Seguramente
no les cabe en la cabeza (a pesar de que los "pencos" son los demás,
y no ellos, por Dios) que existan cosas tan civilizadas como la libertad de
expresión, el derecho de réplica y, mucho menos, el sentido de la
responsabilidad. Contad conmigo para la árdua y titánica tarea de intentar
hacérselo comprender (y si no es posible que lo entiendan, cosa muy probale, al
menos que se entere la gente).
Un abrazo
Julio
Sánchez Román.
P.D.:Seguramente
conocereis otras personas a las que puede que le interese tanto la
"entrevista" como estas tristes líneas. Si os perece bien remitidle
este correo.
P.D. 2: es
posible que este e-mail le haya llegado a alguien que no quiera saber nada de
esto. Que no se preocupe: va con copia oculta.
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